Ya han pasado dos días del incidente entre Marc
Márquez y Dani Pedrosa en el último Gran Premio que se ha disputado del mundial de velocidad, en Aragón. A estas horas todos sabéis
que ocurrió y yo no voy a desvelar nada nuevo, hay overbooking de
opiniones al respecto, no pienso sumarme a ello por lo mismo y porque
ya he dado mi opinión hasta la saciedad en twitter. Pero por si a
alguien le interesa, se la resumo en que lo veo como un lance de
carrera y que no se debe sancionar a Márquez por ese incidente pero
sí podrían llamarle la atención y meterle un par de puntos en su
carnet por reiteración de pilotaje agresivo. Recordar que si le
sancionaran con dos puntos, saldría último en la parrilla de
Malasia.
El caso es que esta publicación trata sobre otro
tema, para mí infinitamente mucho más importante y que casi no se está hablando de ello. Me
refiero al ya famoso cable que se rompió en la moto de Pedrosa tras
el ligero toque de Márquez. Casey Stoner dijo en una ocasión que
estas motos eran pura electrónica, pues a raíz de lo ocurrido en
Motorland Aragón, el tiempo le ha dado la razón.
El dichoso cable forma parte del sistema de control
de tracción, de hecho como pudimos ver, es una de las partes más
importante ya que es el que actúa como sensor y doméstica los 250CV
de una MotoGP. Sin él, lo que vimos, la moto no es gobernable, toda
la potencia sale de golpe y te lanza por orejas. Como podéis ver en
la siguiente imagen, ese cable está situado en el tren trasero de la
moto, concretamente en el basculante y cerca del disco de freno.
En la Japón antigua existían los samuráis, a día
de hoy ya no existen como tal pero la mentalidad nipona no ha variado
tanto desde aquellos tiempos. El honor y el orgullo son parte
esencial del ser en los habitantes del país del sol naciente. Por lo
tanto no cabe ninguna duda que lejos del foco de atención que es el
conflicto Marc/Dani, en Honda están (o deberían estar) realmente dolidos pues se ha
cuestionado su moto y eso es algo que hiere tanto al honor como al
orgullo de la marca del ala dorada.
Lo que pasó en Aragón es totalmente un infortunio
que pocos podían prever, porque pese a que el cable esté expuesto,
también es cierto lo difícil que es darle por el lugar en que se encuentra, por algo es la primera vez que pasa. Pero es imposible no
hacerse algunas preguntas. ¿Cómo puede ser tan frágil una parte no
importante, sino esencial en la moto? ¿Debe tener un recubrimiento
especial o alguna protección para que no vuelva a pasar? ¿De verdad
la fábrica más importante no podía haberlo previsto? ¿Con lo que
cuesta económicamente una Honda de MotoGP no hay otro método más
seguro para ese sensor? Por lo pronto veamos como quedó dicho cable
y luego intentaré contestar algunas de estas preguntas.
Un cable, sea para lo que sea es eso, un simple cable. Un
elemento frágil por naturaleza, algunos más y otros menos, pero al
parecer el de ese sensor es de los débiles. Lo del recubrimiento
especial ya se ve en la imagen, lo hay pero su forma nos informa de
que no está en todo el cable, algo que no entiendo pero tampoco se
puede asegurar que fuese una solución real para evitar lo que ha
pasado. Una protección, no sé si de fibra de carbono, aluminio u
otro material, no soy ingeniero pero no creo que eso sea muy
complicado. De todos modos para eso está el departamento de I+D de
Honda, que si se han cubierto de gloria adaptando un cambio de la F1
a MotoGP, deberían haberlo previsto antes y es que en mi opinión,
algo tan importante debería estar más protegido por lógica y
seguridad.
Queda una pregunta por responder, ¿no hay otro
método para evitar esto? Pues parece ser que sí existe y la tan
detestada Ducati dispone de él. Según informaciones del paddock, al
parecer la moto italiana no dispone de un sensor sino que tiene dos,
en el mismo lugar que la Honda pero uno a cada lado de la moto. Buena
medida de seguridad por si uno de los dos falla o pasa una desgracia
como ha pasado en Aragón. Así que no habría que inventar nada y
aunque suene mal, basta con copiar el modelo italiano, algo bueno tienen al fin y al cabo.
Mi opinión es clara, en resumen. Entiendo que sea
frágil un cable pero la protección que tiene es mínima, debería
de estar previsto (aunque es fácil decirlo a toro pasado, lo
reconozco) y/o tener otro método como Ducati ha hecho.
De todos modos quiero romper una lanza en favor de
Honda. En la imagen que veréis a continuación (de principio de
temporada al juzgar por el fondo blanco) de este párrafo se observa
como dicho cable estaba sin la protección de ahora y aguantada con
una brida para que el cable se mantuviera hacia adentro (casi pegado
al disco de freno) y no sobresaliese lo más mínimo. Lo que quiero
decir con esto es que no ha habido dejadez por parte de HRC, pues se ve
una evolución en dicho sistema y por lo tanto han trabajado en ello.
Hay que pedir explicaciones a la fábrica japonesa,
pero ellos son los primeros que saben que tienen un problema y
seguramente busquen una solución desde ya. La joya tecnológica de
Honda se ha visto en evidencia por un “leve” toque en un simple
cable y eso no es algo que el gran jefe vaya a dejar pasar de largo,
pues Shuhei Nakamoto, es todo honor y orgullo.